Aunque se piense que el acné es algo que solo sucede en la pubertad pueden aparecer en cualquier fase de la vida, y casi siempre en el peor de los momentos. Y es que ¿a quién no le ha pasado?, que de buenas a primeras, ¡pum!, aparecen unos granitos en la frente, barbilla o pómulos prácticamente de la noche a la mañana.
Aunque creas que solo es mala suerte, estos brotes de acné repentino en la cara tienen una explicación. ¡Veamos cuál!
Causas del brote de acné repentino en la cara
Existen varios motivos por lo que podría aparecer un brote de acné en la cara u en otras partes del cuerpo (ya hemos visto anteriormente que también salen granos en la espalda y granos en las nalgas).
Como hemos adelantado, esto no solo les sucede a los adolescentes que se encuentran en un proceso de constante cambio hormonal que conlleva el hacerse hombres y mujeres. También pueden ser otras causas como fumar o el uso de cosméticos los que incentivan a que se produzca algún brote junto a un estrés excesivo, otra de las causas que afectan a la salud de piel.
Principalmente, el origen que explica esta situación repentina de la piel es el del cambio hormonal brusco.
El brote repentino de acné en la cara puede tener diversas causas, y su origen puede variar según el individuo. Algunas posibles razones incluyen:
- Cambios hormonales: Fluctuaciones hormonales, comunes durante la adolescencia, menstruación, embarazo o uso de anticonceptivos, pueden desencadenar brotes de acné.
- Factores genéticos: La predisposición genética juega un papel importante en la propensión al acné. Si hay antecedentes familiares de acné, es más probable que se experimenten brotes.
- Cuidado de la piel inadecuado: El uso excesivo de productos para el cuidado de la piel, especialmente aquellos que obstruyen los poros, puede contribuir al desarrollo de acné. También, la falta de limpieza facial adecuada puede ser un factor.
- Estrés: El estrés puede desencadenar respuestas hormonales que afectan la piel, aumentando la producción de sebo y contribuyendo al acné.
- Dieta: Algunos estudios sugieren que ciertos alimentos con alto índice glucémico o lácteos pueden estar relacionados con el acné en algunas personas.
- Uso de ciertos medicamentos: Algunos medicamentos, como corticosteroides o anticonvulsivos, pueden desencadenar brotes de acné como efecto secundario.
- Cambios climáticos: Las condiciones ambientales, como la humedad, el calor o la exposición excesiva al sol, pueden influir en la aparición del acné.
- Maquillaje obstruyente: El uso prolongado de maquillaje comedogénico o productos para el cuidado de la piel que no son adecuados para tu tipo de piel puede contribuir al acné.
En cualquier caso, el acné y las hormonas van extremadamente relacionadas siendo las hormonas androgénicas las “culpables”.
Hormonas: el principal motivo del acné
La testosterona es una hormona presente tanto en hombres como en mujeres, cuando esta aumenta en la adolescencia estimula la producción de sebo, que es uno de los causantes del acné.
Con el paso de los años, en los hombres esta hormona se estabiliza, pero la mujer sufre fluctuaciones durante ciertos momentos claves como:
- La menopausia.
- El embarazo.
- Ciclo menstrual.
En estas tres circunstancias o etapas los niveles de testosterona fluctúan constantemente, además en la menopausia otras hormonas como la progesterona y el estrógeno bajan sus niveles provocando, entre otros síntomas, problemas dérmicos.
Recomendaciones contra los brotes de acné
Que los brotes de acné en principio sea por motivos que difícilmente se puede controlar, no quiere decir que no se pueda mejorar el aspecto de la piel. Sugerimos que se siga un ritual de limpieza o soluciones como DermaClear o Carbon Peel de forma periódica y beneficiarse de las propiedades del carbón activado.
Además, en el caso de Carbon Peel al ser un tratamiento láser también de rejuvenecimiento mejora mucho la piel acneica y evita la aparición de cicatrices.
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